Actualmente prácticamente quien no esté presente en la red no existe, y hablamos en concreto casi de la economía y de la forma en la que hacemos dinero y nos ganamos la vida. Por ello, hay toda una serie de maneras de promocionarse en la red de redes, y de monetizar esta actividad. Por lo tanto y aunque existen muchos métodos para que una empresa se anuncie o haga campañas de publicidad, y muchas para que los autores de blogs o sitios web ganen dinero, la estrella hasta el momento sigue siendo el marketing de afiliación.
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Pero, habiendo tantísimas formas para que una empresa se anuncie, ¿por qué se sigue prefiriendo el marketing de afiliación?
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Antes de la llegada de Internet
Antes de internet, las empresas llamaban por teléfono, o dejaban publicidad impresa en los buzones, e incluso organizaban eventos para atraer la atención de sus clientes potenciales, pero era caro, y con resultados no muy atractivos si se comparaba la relación costo-beneficio.
Amazon fue la primera que se decantó por este método, decidió implementarlo y cuando apenas era una joven aunque ya poderosa startup, allá en los últimos años del siglo pasado, la estrategia de Amazon fue compartir sus ganancias a quienes les ayudaran a crecer, y los resultados fueron impresionantes. Amazon es actualmente una de las empresas mundialmente más conocidas, y muchas son las firmas que utilizan este mismo método al tratar de seguir el ejemplo de este gigante del ecommerce.
Otro ejemplo de marketing de afiliación es el de la empresa Uber que ha crecido hasta ser la empresa que conocemos actualmente: los propietarios hacen las veces de taxi, y Uber les conecta con los usuarios a través de su plataforma. El mismo mecanismo.
Bien, ¿por qué las empresas siguen utilizando éste método por encima de otros? Hay muchas razones, pero te damos a conocer algunas.
1. La deslocalización
Las empresas han luchado siempre por eliminar la brecha geográfica de los mercados, y la solución ya la tienen a su alcance: Internet. Hay miles de sitios web, blogs, medios de comunicación, de todo el mundo, y canales para llegar a ellos en un panel de control desde su oficina.
Pueden llegar a toda Latinoamérica desde una pequeña oficina en un pueblo de España.
Además, la empresa elige el formato publicitario, duración, tamaño, etc.
2. Los beneficios son cualitativos y cuantitativos
El marketing de afiliación tiene el objetivo de generar ingresos, de maneras muy diferentes como lo hace affilinet desde hace años, al intentar encontrar soluciones personalizadas que mantengan viable un proyecto online a largo plazo. Además, otros beneficios cualitativos son: aunque nadie haga clic en tus anuncios, tu marca se queda posicionada en su mente, miles o millones de personas verán tu marca, tus productos o servicios, hagan o no clic en ellos. Eso no lo pagas, y es la principal ventaja del marketing de afiliación.
3. No necesitas invertir (mucho) dinero
Las empresas se centran solamente en diseñar la campaña de publicidad. No tienen, como hemos dicho antes, que comprar ningún software de gestión o seguimiento de sus campañas, hay muchas plataformas, incluso empresas dedicadas a conectar anunciantes con blogs o sitios web que buscan ganar dinero con el marketing de afiliación.
Tampoco necesita invertir en atención al cliente, ni nada de eso, todo lo hace el interesado en anunciar tus productos, para poder ganar dinero con ello. La inversión es mínima, y el alcance es enorme.
El bloguero, por su parte, tan solo debe preocuparse de saber cómo ganar dinero con su blog.
Hay muchos más beneficios para las empresas, pero éstas son las que convierten al marketing de afiliación en el ojo derecho de la monetización. Por su parte, quien busca ganar dinero con ello, debe elegir bien el programa, si quiere obtener beneficios, y que la empresa también lo tenga, claro.
Edmundo Pérez es licenciado en Administración, mexicano y radicado en Cáceres, instructor de diseño web en Flash cuando todos lo usaban, fascinado por la difusión de la ciencia y la cultura y aprendiz de Inbound Marketing, comparto lo que he aprendido de ello en Branketing.