Emprender está de moda, eso ya lo sabemos todos, pero ahora también está de moda reinventarse. Que gran palabra la de reinventarse. ¿Pero exactamente que es reinventarse?, es que se usa con tanta facilidad la palabra que hasta parece fácil :-).
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Según los expertos como por ejemplo el psiquiatra Luis Rojas Marcos, “reinventarse siempre es algo provocado, por lo general no cambiamos si no se nos obliga a ello”. Atendiendo a esta definición, definitivamente no es fácil.
En el mundo de la empresa, y los que llevamos unos años en ella hemos oído cientos de veces “deberías reinventarte” cuando hemos sufrido alguna crisis, y claro que debemos hacerlo, ¿pero cómo?
¿Quiénes no conocemos a alguien que en los últimos tiempos han sufrido un revés que les ha obligado a reinventarse?, por ejemplo yo soy uno de ellos, no hace muchos años sufrí una gran crisis en mis empresas, la crisis fue tan profunda que la mejor opción que tuve fue venderlas, durante un tiempo navegué por el desierto, no sabía que hacer y por dónde empezar, de forma constante desde el exterior me decían la dichosa palabra “reinvéntate” y mi interior lo mismo me decía. La respuesta siempre la misma, SÍ, ¿pero cómo? Os puedo garantizar que después ya de muchos años y de haber reconstruido mi mundo empresarial, todavía a día de hoy estoy en pleno proceso de reinvención :-).
Sé de lo que hablo, porqué lo he vivido en mis propias carnes, hoy por desgracia mucha gente está envuelta por culpa de esta crisis, en procesos de reinvención, de empezar de cero de nuevo, de cambiar radicalmente de profesión…, es un proceso largo; pero no imposible.
Reinventarse es un proceso que requiere de mucha paciencia y mucha prudencia, pero a su vez es un nuevo aliciente para auto motivarse, descubrir facetas profesionales que uno desconoce, aprender incluso lo más obvio, reinventarse no es convertirse en alguien diferente, PARA NADA. Todo lo contrario, es reforzar muchas dotes que a lo mejor tienes guardadas en el baúl de los recuerdos.
Con la cantidad de personas que en España están desempleadas, empresarios, abogados, arquitectos, operarios de la construcción, profesores, gente de la hostelería, mecánicos, etc., a muchos no les queda más remedio que reinventarse, prepararse para cambios sustanciales, pero no es el fin del mundo, es una piedra más en el camino y nuestra obligación es intentar sortearla de la mejor manera, y por suerte o no pasa por nosotros mismos. Salir del conformismo de “no hay trabajo” no ayuda en nada. Lógicamente no es lo mismo a los 30 años que a los 40 y mucho menos que a los 50, pero conseguir se consigue.
Aquí te dejo una serie de consejos que pueden ayudarte a reinventarte :-), a mí me ayudaron mucho en su día 🙂 :
- Dedica parte de tu tiempo diario al autoconocimiento personal.
- Se activo.
- Mantén siempre una actitud enérgica y positiva.
- No esperes a que te resuelvan la vida, resuélvela tú.
- Aprende a vivir con la incertidumbre, pero no dejes que esta te coma la moral.
Una vez tienes claro lo anterior, entonces ha llegado la hora de empezar de verdad, ¿y cómo?:
- Identifica las diferentes áreas donde podrías empezar
- Crea un plan de acción
- Pon en marcha el plan de acción
- Busca apoyo de quienes puedan orientarte.
Ahora bien, yo decidí reinventarme en mi mundo, en el mundo que conozco, el mundo de la empresa, quizá tuve la suerte de poder hacerlo, y no sé si hubiese sido capaz de hacerlo en otra dirección y en otra profesión, mi mundo era la Industria y hoy es Internet, para mí una reinvención total 🙂
David Fabrés, es CEO en Locos by Friday, y colaborador en HoyOnline.tv. Escribe para emprendedores en los blogs: Hispanonetworkers donde está publicando 365 recetas para emprendedores, donde cada día publica una y en Networkersmoney.com. Se le puede seguir también también a través de Facebook en RecetasParaEmprendedores.
Es cierto que los grandes cambios personales y profesionales vienen precedidos de una presión, una situación que nos saca por completo de nuestra zona de confort. Llegar un momento en el cual nos sentimos indefensos es complicado, pero hay que mantener la calma, que como bien mencionas, no es el fin del mundo.
🙂 Gracias Olmo por tu comentario