Descubrir los atributos que forman parte de nuestra marca personal, trabajarlos conscientemente para desarrollarlos lo máximo posible, y proyectarlos adecuadamente usando las herramientas necesarias, contribuyen positivamente a nuestro posicionamiento como profesionales de referencia en nuestra área de especialización, lo cual ayuda a la generación de oportunidades profesionales en el largo plazo.
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Lo anterior puede parecer una definición de libro, pero la he utilizado a propósito para indicar algunas premisas clave sobre esta cuestión:
- Una marca personal no se crea, puesto que cualquiera de nosotros ya la tiene. De lo que se trata es de averiguar cuáles son los elementos que nos definen no sólo como profesionales, sino también como personas. Es aquí donde es preciso hacer una reflexión rigurosa que incluya la definición de nuestra visión en el largo plazo (qué queremos ser, dónde nos gustaría estar en 10 años), el establecimiento de los objetivos necesarios para cumplir ese ‘sueño’, y especialmente un autoanálisis que nos permita conocer cuáles son nuestras principales fortalezas y debilidades. Todo ello se convertirá en los cimientos sobre los que construiremos nuestra identidad profesional, y que nos permitirá sentar las bases de nuestro plan de marca personal.
- La marca personal es real y ‘tangible’, puesto que genera (nos guste o no), unas determinadas percepciones en aquellos que nos rodean e interactuan con nosotros. Esas sensaciones que provocamos (quizá inconscientemente), condicionan actitudes en los demás. Si transmitimos valores positivos, es muy probable que los demás realicen acciones que nos afecten positivamente. Por ello, la marca personal debe trabajarse de la forma más consciente posible.
- La proyección de la marca personal (podríamos incluso llamarla auto-promoción) no es una cuestión negativa ni arrogante. Es algo necesario, dado que vivimos en un contexto de sobresaturación de buenos profesionales tratando de destacar lo máximo posible. Podemos ser muy buenos profesionales en nuestro terreno, pero no somos los únicos ni probablemente los mejores. Por ello, tenemos que salir ahí ‘fuera’ y mostrar, además de demostrar, que somos una opción que ofrece garantías. El objetivo: ser elegidos entre todas las opciones posibles.
- La gestión de nuestra marca personal no se da en momentos puntuales, sino que tiene una duración ilimitada. Trabajar en un proyecto de marca propia no ha de producirse cuando lo necesitemos, sino antes de que se produzca dicha necesidad.
- Los resultados se obtienen en el largo plazo. La marca personal es una maratón, no una carrera de 100 metros.
- No es lo mismo obtener un empleo que generar oportunidades profesionales. A pesar de su similitud, existen diferencias. El perder un empleo y necesitar reincorporarse al mercado laboral lo antes posible, exige poner en marcha los mecanismos tradicionales de búsqueda de empleo; pero esto no es trabajar la marca personal. En cambio, la generación de oportunidades profesionales es también un concepto de largo recorrido en el que sí es necesario trabajar y explorar las capacidades de nuestra marca propia.
Con la suficiente constancia y la necesaria paciencia, y obviamente con un trabajo de calidad, el trabajo sobre nuestra marca personal trabaja directamente en la generación de confianza a nuestro alrededor. Si conseguimos con el tiempo transmitir la suficiente credibilidad profesional, surgirán oportunidades profesionales, puesto que nos estaremos posicionando como una autoridad competente en nuestra área profesional.
Miguel Ángel Riesgo tiene un Executive Master en E-Business por el IE Business School y es licenciado en Gestión Comercial y Marketing por ESIC, así como diplomado en Informática de Gestión. Mantiene su blog profesional en el que habla sobre empleo 2.0 y marca personal, así como de gestión de equipos humanos. Colabora con Infojobs en su blog sobre orientación laboral, en la ‘escuela de comerciales’. Ha trabajado durante los últimos 7 años como Sales Manager en Infojobs.
Estoy contigo Miguel Ángel. También es verdad que somos muchos que tenemos nuestro personal branding y no tenemos espacio para todos.
Ante los ojos de un/a seleccionador/a, hay muchos puntos de vista que nos pueden afectar. En mi caso, desde que estoy en transición profesional me he encontrado en alguna entrevista que al ver que llevaba casi 2 años sin trabajar, notaba en su cara un pequeño guiño de desconformidad y nadie me preguntó que había hecho durante este tiempo.
Hace unos años quizás si que era sospechoso que una persona estuviera mucho tiempo desempleada, pero ahora con un 27% de parados es muy frecuente y los seleccionadores no empatizan con sus candidatos y si además pasas de los 50 años………
Necesitamos muchas empresas nuevas para que crean muchos puestos de trabajo, no solo en el turismo, también en las industria.
No hacer caso de los que dicen que los españoles no somos competitivos, tenemos grandes profesionales que tienen que emigrar fuera de nuestro país y que están dispuestos a sacar adelante nuestras empresas, sólo falta que crean en nosotros.
Saludos