Lanzarse a la conquista del mercado exterior es una aventura apasionante que puede reportar grandes ventajas a la empresa, pero que también requiere cumplir una serie de requisitos necesarios para evitar problemas e incluso un fracaso que pudiera llegar a comprometer la misma supervivencia del negocio.
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Aunque no hay fórmulas de éxito ni consejos infalibles que permitan trazar un camino seguro a la hora de internacionalizar, sí hay errores que claramente impiden el avance en el proceso de internacionalización.
Conocer estos fallos es una manera sencilla de orientarnos a la hora de intentar hacer todo lo posible para convertir la internacionalización en una gran oportunidad empresarial. De este modo, si bien evitar estos errores ni mucho menos garantiza el éxito en el proceso de internacionalización, sí ayuda a controlar la complejidad del proceso.
Ya sea por desconocimiento o porque aplicamos ideas a partir de una lógica equivocada, a menudo podemos cometer graves errores, como los 5 siguientes:
- La improvisación: Se requiere hacer un análisis previo de mercado, analizando los países más atractivos para nuestro producto o servicio, las dificultades de acceso, así como el mejor modo de penetración, entre otros factores. Por el contrario, prescindir de un estudio o elegir un mal modelo de negocio puede no sólo ser un mal inicio sino también llevar al traste el plan de internacionalización y hasta a la empresa.
- Falta de preparación previa: La decisión de internacionalizar exige una preparación y la elaboración de un plan con vocación de permanencia y una conquista de mercados progresiva. No todas las empresas están listas para exportar y, en todo caso, siempre hay aspectos que mejorar, lo que a su vez implica inversiones a partir de un consejo experto.
- Un concepto sectorial: Mantener la misma estructura empresarial y entender la internacionalización como un departamento más. En este sentido la formación de los recursos humanos es fundamental. Muy a menudo, el valor de una idea depende de la capacidad de ejecución de la misma, por lo que la formación de los recursos humanos y su formación para obtener un talento global que nos permita funcionar como un equipo eficaz será clave, así como una reestructuración del negocio para satisfacer las nuevas necesidades.
- No prevenir los riesgos económicos: La falta de previsión de los riesgos económicos puede deberse tanto con una falta de evaluación de la rentabilidad del proyecto o una errónea valoración, como con un concepto erróneo de la internacionalización, entendido como una huída hacia adelante ante situaciones de crisis económica en el mercado local. En este aspecto, una visión empresarial rigurosa es decisiva para que progrese el proyecto, ya que la internacionalización implica una inversión importante, y a su vez conlleva riesgos económicos.
- Falta de adaptación y de estrategia diferenciadora: No adaptar un producto o servicio a la idiosincrasia y costumbres del nuevo mercado puede llevar al fracaso del proyecto. No sólo han de tenerse en cuenta las particularidades de cada país, sino también la estrategia diferenciadora que permita explotar las ventajas competitivas para hacer frente a la feroz competencia global.
Por lo tanto es muy útil tener en cuenta esta serie de pautas con el fin de minimizar un posible impacto, que por otro lado suele ser bastante común, a la hora de salir de nuestras fronteras. Este ha sido nuestro listado de los errores graves de los emprendedores.
Anna Isan, politóloga y socióloga licenciada además en ciencias de la información. Ha publicado de forma puntual artículos en diferentes blogs relacionados con la empresa y la internacionalización. Actualmente es redactora del Blog Eaeprogramas.es/Internacionalización donde habla sobre modelos de Internacionalización y exportación e importación como negocio.
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