Últimamente ha habido muchos cambios en la empresa donde trabajo. Los cambios han sido de todo tipo, desde la marca global hasta los requisitos de contratación. Esto no me ha parecido algo fuera de la ordinario. En una empresa de grandes dimensiones es normal que haya momentos de muchos cambios. Sin embargo, a la gran mayoría de mis compañeros tanto cambio los está poniendo inquietos.
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Los responsables de llevar por buen camino la empresa se han dado cuenta de la desestabilización general. Y aunque han querido poner calma al asunto, sus esfuerzos no han dado resultado. Poniéndome un poco a analizar la situación he dado con la respuesta. ¿Por qué los cambios generan estrés en la mayoría de los trabajadores? Porque nunca se les educó bajo una situación de cambios constantes.
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El cambio no es ni bueno ni malo
Desde siempre ha habido muchos cambios en mi vida. Por ello es que estoy habituado a ellos. Para comenzar tuve varias mudanzas en la infancia. Entre muchas otras cosas. En su conjunto todos mis cambios de pequeño me prepararon para los cambios que enfrenté cuando me mudé lejos para estudiar la universidad. Y ahora que trabajo en un lugar lejos de la familia no siento como si estuviera perdido.
Y es que los cambios por sí solos no son buenos ni malos. Cada cambio que ocurra tendrá el significado que cada quien le interprete. Para mi no hay cambios malos. Si puede haber cambios que no me agraden tanto. Pero la idea es adaptarse y seguir. Es por estas razones que los cambios a nivel empresarial no me aterran. Con el tiempo incluso se llega a ver lo necesarios que son. Porque cuando se entiende su importancia incluso se llega a buscar.
Abraza el cambio y olvida el estrés
Con el paso de los años me he dado cuenta que el estrés es una enfermedad. Una que está acabando poco a poco con la vida de muchas personas. Y aunque son muchas las causas del estrés, creo que la mayor parte del problema está relacionada con los cambios. Basta un poco de análisis detallado de las personas que nos rodean para ver que incluso cambios pequeños en su rutina los descontrolan por completo.
No es fácil para alguien a quien le aterran los cambios empezar a verlos como algo muy bueno. Pero aquellos que aspiran a lograr más en todos los aspectos de su vida lo tienen que entender para ir mejorando. Esa falsa sensación de estabilidad que se alcanza en muchos aspectos de la vida es solo una ilusión. No existe algo que permanezca inmutable en este universo, razón por la cual estar adaptados a los cambios debería ser la normalidad, y no el querer quedarse quietos.
Olmo Axayacatl es ingeniero mecánico agrícola de profesión, con una maestría en ciencias en horticultura, sin planes para el doctorado pero le gustaría irse algunos años a un país de habla inglesa, mientras tanto es profesor y bloguero.
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