A día de hoy son muchos los que se rinden a los encantos de las tiendas online. A la gran mayoría le entusiasma la idea debido a la confianza que depositan en sus productos y en las «infinitas» posibilidades que ofrece la red. ¿El resultado? Muchas de sus tiendas sucumben. ¿Quieres evitarlo? ¡Sigue leyendo!
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En primer lugar, lleva a cabo una evaluación realista de los productos que ofreces (sí, sabemos que las críticas son duras, por recuerda que son constructivas), de los procesos y, sobre todo: de la potencia del mercado online para el tipo de tienda que quieres abrir. (No pensarías que el marketing online funcionaba distinto al de la vida fuera de la pantalla, ¿no?).
Si eres de los impulsivos de los que hablamos en un principio, esto te va a sorprender: la mejor forma de venta online no es tener una gran tienda online desde el principio. Antes de abrir una gran tienda en la red, haz primero una especie de prueba con, digamos, por ejemplo, una página estática en la que ofrezcas tres o cuatro productos. A partir de ahí, desarrolla estrategias de marketing orientadas a la venta de esos productos teniendo en cuanta los motores de búsqueda y las redes sociales y observa los resultados. Si pasado un tiempo no hay resultados favorables, cambia el plan de marketing y, si aun así los resultados no cambian, admítelo, tu concepto para esta tienda se merece más estar en una papelera que en la red.
Para que no tengas que pasar por este mal trago, te ofrecemos 7 maravillosos consejillos que te evitarán la desilusión:
- Busca el mejor producto de la gama.
- Observa qué hace la competencia para posicionar sus productos (observa, ¡no copies!).
- Crea tu propia página web estática, no hace falta que inviertas demasiado en algo muy elaborado a priori. ¡Pero no la desatiendas! Al contrario: trátala como si fuese tu página de ventas oficial.
- La comunicación emocional es un factor relevante: vende cada uno de tus productos como si fuese el mejor. (¡Recuerda que si no te lo crees tú, no se lo creerá nadie!).
- No olvides incluir métodos de pago fácil ni el correcto funcionamiento del servicio de entrega.
- Ten en cuenta factores esenciales como: las pruebas A/B, las estadísticas con respecto al número de visitas y la cuota de consumo.
- Analiza siempre los resultados de tu mini-tienda online.
Javier Gázquez en tan solo 5 años ha conseguido colaboraciones con empresas globales como www.Textbroker.es, grupos de Dropshipping de prestigio como Dropalia.es e incluso emprender su propia agencia donde se especializa en adaptar negocios convencionales a la red mediante estrategias de negocio, pero de lo que más disfruta es de su blog de trucos de marketing online y ecommerce www.blogtimista.es.
Por favor, cuidado! maticemos los conceptos de manera apropiada y clara.
Supongo que porque quizás pretendes sintetizar al máximo, pero una web estática (ver punto 3.) no tiene nada que ver con tu título del post («Tienda Online») a la que se le atribuyen funcionalidades más complejas, flexibles y de gestión dinámica con las posibilidades de la web 2.0 . Si lo piensas bien da lugar a confusión, no crees?
un afectuoso saludo desde La Nave.
Gracias